En los países con gran población musulmana chiíta se prevé que se intensifiquen las medidas de seguridad ante el temor de que se produzcan altercados en torno a la fiesta religiosa de Arbain, los días 27 y 28 de septiembre. Los principales disturbios se producirán en Iraq, donde se celebran las mayores concentraciones. El elevado riesgo de atentados contra intereses chiíes por parte de grupos extremistas islámicos suníes subraya la necesidad de minimizar el tiempo que se pasa en torno a los eventos relacionados.
El Arbain concluye el periodo de luto de 40 días que sigue a la Ashura, que conmemora la muerte del imán Husayn ibn Ali, nieto del profeta musulmán Mahoma. Aunque la naturaleza de la conmemoración difiere en toda la región, es probable que se celebren actos relacionados en Bahréin, Iraq, Irán, Kuwait, Líbano y Arabia Saudí.
El aumento de las medidas de seguridad y las restricciones de circulación correspondientes durante el periodo del festival alterarán los viajes en Iraq, especialmente en los principales aeropuertos del país. También se desplegarán más de 20.000 efectivos de seguridad adicionales durante la peregrinación. Alrededor de 40.000 extranjeros, entre ellos 30.000 de Irán, pueden participar, pero deben viajar a Iraq por vía aérea y cumplir los requisitos de entrada vinculados a la COVID-19. En 2020, Iraq prohibió la entrada a los peregrinos extranjeros debido a la pandemia.
Los empleados en países con grandes comunidades chiítas deben respetar las costumbres locales y las sensibilidades religiosas, ya que éstas tienden a aumentar durante este periodo. Se recomienda evitar las reuniones relacionadas y minimizar el tiempo que pasan cerca de los centros religiosos chiíes debido al riesgo de amenaza y para minimizar los retrasos.